"Toda adicción es una respuesta a un dolor emocional no resuelto." — Dr. Gabor Maté
Vivimos en una época donde cada vez más jóvenes se enfrentan a la drogadicción. Las estadísticas aumentan, pero pocas veces nos detenemos a mirar qué hay detrás del consumo, más allá del síntoma.
- Desde la biodescodificación, se plantea una mirada diferente: la adicción no es el problema, sino el intento inconsciente de resolver un conflicto emocional no elaborado.
¿Qué nos dice la Biodescodificación?
La biodescodificación es una herramienta terapéutica que explora los síntomas físicos o conductuales como la expresión de un conflicto emocional inconsciente.
En el caso de las adicciones, se busca comprender:
- ¿Qué vacío interior está tratando de llenar esta persona?
- ¿Qué parte de sí mismo intenta acallar?
- ¿Qué historia familiar no contada se está repitiendo a través de él?
¿Alguna vez te has preguntado por qué algunos jóvenes, incluso en hogares aparentemente estables, caen en las adicciones?
Comparte tus ideas o experiencias en los comentarios. Tu voz también puede ayudar a otros a comprender mejor este fenómeno.
Detrás del síntoma: posibles orígenes emocionales
Veamos algunas causas emocionales comunes que se observan en jóvenes con adicciones, según la biodescodificación:
1. Heridas de infancia no resueltas
Muchos jóvenes que consumen drogas crecieron en entornos donde no se sintieron vistos, escuchados o validados. Aunque hayan tenido comida, techo y educación, tal vez les faltó presencia emocional, afecto o reconocimiento.
2. Conflictos transgeneracionales
La biodescodificación nos invita a mirar el árbol genealógico. A veces, los jóvenes repiten patrones de exclusión, abandono o sufrimiento de generaciones anteriores, incluso sin saberlo. Un abuelo alcohólico, una tía excluida, un secreto familiar… todo eso puede influir.
3. Sensación de no pertenecer
Muchos jóvenes adictos comparten una frase interna:
“No encajo. Nadie me entiende. No tengo lugar.”
El consumo puede volverse una forma de crear una identidad de pertenencia artificial, por ejemplo, en grupos sociales donde todos consumen.
4. Culpa inconsciente o deseo de autodestrucción
En casos extremos, el joven siente que no merece estar bien, como si inconscientemente buscara un castigo. Esto puede relacionarse con abortos no reconocidos en el árbol, hermanos fallecidos, o duelos mal elaborados.
Reflexión guiada:
Cierra los ojos un momento y pregúntate:
¿Qué podría estar intentando decir este joven a través de su conducta?
Escribe lo que surja, sin juzgar. A veces la respuesta está en lo más simple: “Quiero que me veas. Quiero sentir que importo.”
Reflexionemos un momento
En lugar de etiquetar al joven como “drogadicto”, ¿Qué pasaría si lo miramos como alguien desesperado por amor, por sentido o por comprensión?
Cambiar la mirada no significa justificar el consumo, sino abrir la puerta a una sanación más profunda.
- Propuesta para ti (padre, madre, terapeuta, educador):
Completa esta frase:
"Creo que los jóvenes recurren a las drogas porque sienten que..."
La Conciencia Sana
Desde la biodescodificación, se entiende que cuando tomamos conciencia del conflicto que origina un síntoma, el cuerpo y la mente pueden dejar de manifestarlo. La drogadicción, vista así, no es el enemigo, sino un mensajero.
El objetivo no es solo "dejar la droga", sino sanar la raíz emocional que llevó al joven a necesitarla.
Preguntas para ti, lector o lectora:
- ¿Qué historias no dichas hay en tu árbol familiar?
- ¿Qué conflictos sin resolver crees que podrían estar repitiéndose en tu familia?
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